Unos estiman que se podría vender hasta en €4 millones, yo creo que se va a vender en más.
Cuando Stirling Moss y Dennis Jenkinson corrieron este Maserati chasis número 3501 en La Mille Miglia de 1956, el auto era un 350S propulsado por un seis cilindros. Al fallar los frenos y dar de si, el auto se despistó y sufrió grandes daños, afortunadamente tanto Moss como Jenkinson salieron ilesos.
Después de dicho incidente el auto se convirtió en una cama de pruebas para el nuevo 450S. La carrocería fue cambiada por una nueva diseñada por Fantuzzi, la cual contaba con un cofre abultado y descansaba sobre una distancia entre ejes alargada para poder acomodar el nuevo motor V8 que propulsaría al 450S.
El auto no vivió muchas experiencias de carreras, y después del Gran Premio de Suecia de 1956 se mantuvo guardado hasta 1965 cuando Maserati lo vendió sin motor. Uno de sus dueños le instaló un V8 de Corvette, pero fue en 1981 cuando un coleccionista italiano lo adquirió y lo restauró con ayuda y aprobación de la marca del tridente a su configuración original. Es decir, que un V8 Maserati de cuatro carburadores Weber 45 IDM que produce 520 hp es ahora el corazón de este clásico.
La subasta se realizará el 10 de mayo en Mónaco, por lo que si buscas un regalo original para tu madre no tendrás que buscar mucho más.
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