Hace una semana me invitaron a la presentación del nuevo aromatizante compacto para autos Febreze Car. Además de la presentación del producto, el evento incluía un par de vueltas a una parte del Autódromo Hermanos Rodríguez como co-piloto de un auto NASCAR conducido por Rubén Rovelo.
Como ya lo he mencionado en varias ocasiones, NASCAR no es lo mío, aunque a veces critico la serie, no la desprecio, ni le quito su mérito. Así que pensé que el evento era una oportunidad para apreciar más la serie, para empezar a agarrarle un poco más de gusto y así por fin empezar a seguirla un poco más.
Para variar el tráfico nos retrasó, y llegamos poco menos de una hora tarde. No sin una buena experiencia, ya que pedimos un taxi y la conductora de éste cumplía años ese día, para llegar al evento, ella tuvo que manejar una parte del circuito lo cual le encantó y fue un regalo excelente de cumpleaños.
En fin, el evento fue muy sencillo y el highlight eran las dos o tres vueltas que Rubén decidiera darte. Mi turno llegó, no sabía que esperarme ya que nunca había estado dentro de un auto NASCAR siendo conducido al límite. Pensé que la aceleración se iba a sentir de golpe, que la velocidad me iba a dar vértigo y que probablemente me iban a dar náuseas.
Nada de eso pasó, aunque Rubén llevaba el auto al límite, nunca tuve la sensación de ir en una montaña rusa o algo semejante. Lo que si sucedió, fue que, en mi opinión, fui el co-piloto al que le dieron las mejores vueltas. A parte de que me tocaron 3 vueltas al corto circuito, Rubén siempre mantuvo el coche al límite, sobre todo en una parte donde había unas “eses” y patinó el auto en las tres curvas. Al final de las vueltas lógicamente te daba unos trompos, uno o dos, a mi me tocaron mas de tres y para los dos lados. Muy divertido, pero lamentablemente no pude grabar mi vuelta.
¿Funcionó el evento para empujarme a seguir mas la NASCAR? La verdad es que no, pero si me sirvió para llegar a la conclusión de que no son ni los pilotos, ni los autos lo que me aleja de ella, sino las carreras en si.
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