Cuatro cilindros, 2.0 litros, turbocargado + sistema híbrido de carreras = ruido divino.
Éste es el Lexus que competirá con el Honda NSX y el Nissan GT-R en el campeonato Super GT de Japón.
El NSX de calle todavía no está listo, pero su desarrollo también se llevará a cabo en las pistas de carreras.