Lo que me llamó más la atención no es lo que le hacen al auto, sino algo más…
Ya todos sabemos que el piloto mexicano de Formula 1, Sergio “Checo” Pérez, ha firmado un contrato por “varios años” con McLaren, contrario de la especulación que hasta hace unos meses lo ligaba fuertemente con Ferrari.
Personalmente creo que es la mejor decisión que Sergio pudo tomar. Aunque todos queríamos que se fuera a Ferrari, si eso hubiera sucedido, Checo definitivamente hubiera quedado en el estatus de #2. ¿Qué significa eso? Que iba a ser el escudero de Fernando Alonso quien claramente tiene preferencia en el equipo de Maranello, que se iba a tener que sujetar a las órdenes de equipo, las cuales siempre beneficiarían al español sobre el mexicano.
Alonso se ha ganado esos privilegios con su talento y resultados que ha llevado a la escudería, así como también con su carácter de no querer una fuerte competencia en el mismo equipo, como lo vimos con McLaren en el 2007. Fernando claramente dejó ver que él está contento con un co-equipero que no le amenace perder su posición de #1 dentro del equipo. Esto lo hizo más evidente al declarar que “en mi opinión necesitamos tener un piloto que respete a Ferrari, que respete la tradición de que aquí trabajamos por el equipo…”. Declaración que si analizamos un poco quiere decir: “necesitamos un piloto que haga lo que Ferrari quiera y se comporte como #2”.
Ser piloto de Ferrari ciertamente trae muchas ventajas, una de ellas es que te den coches de la compañía terminados a tu gusto, a Schumacher le dieron un FXX y en Mónaco se ven a los grandes de la Scuderia rondar las calles en (inserte el modelo mas reciente de Ferrari).
Este año, tras la adquisición de Chrysler por parte de Fiat, el modelo regalado a los pilotos es un poco, digamos, de menor calidad. El “auto” que les han obsequiado es un Jeep Cherokee SRT8 con acabado exterior en pintura Rosso Corsa (la misma que se usa en los autos de F1 de Ferrari), acentuaciones en negro, espejos laterales en fibra de carbono, una bandera italiana bajo el spoiler trasero, e interiores terminados en la calidad que distingue a la marca Italiana.
Equipado con un motor HEMI 6.4 l V8 que produce 468 hp y 460 lb/ft de torque permite al Jeep acelerar de cero a cien en 5 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 257 km/h.
Parece que la nevada les cayó perfecta en Maranello para presentar el regalo a sus pilotos oficiales, pero si cuentas con un FF que puedes usar en este tipo de clima, ¿lo cambiarías por un “simple” Jeep SRT-8?
